Hoy sábado, por la mañana, a eso de las 8:15 he salido por el PIE para hacer una tiradita larga. Ayer hizo un dia de perros con un vendaval de "cohones". Así que esta mañana iba pendiente pero cual ha sido mi sorpresa que el dios Eolo se comportaba, no hacía nada de viento. Solo 21 grados en el termómetro del Palacio de Congresos que intuían un entreno húmedo y bochornoso. Lo anunciaba el cielo plomizo, y a veces, el centelleo de los relámpagos tras las nubes.
Al llegar al PIE tiré por el canal de la Ranilla para cambiar de aires, una ida y vuelta, 2,5km por el margen izquierdo. La segunda vuelta, otra ida y vuelta, pero esta vez por el margen derecho. De buenas a primeras se levanta un viento bestial, yo parado alli en medio del canal, a la derecha las naves del MercaSevilla, tras de ellas, a lo lejos unos nubarrones mas negros que plomizos y un viento que hacía revolotear alocadamente a los pájaros y levantar papeles a lo mas alto del cielo.
¡Madre mia, parece un tornado! mis pensamientos casi se vuelven realidad, una nube de polvo y arena viene hacia mi y ¡zasss! mi apreciada gorra gris se desprende de mi cabeza en un visto y no visto. Pienso, que ya me he quedado sin ella, cualquiera baja al canal a recogerla, pero veo que unos arbustos han parado su meterorítico viaje por los aires. La recojo y a duras penas continuo mi entreno. A lo lejos veo moverse una mancha negra en el sendero, a ver.... ¡coño! un gato negro, "mardita" sea mis estampa, lagarto lagarto....
Media vuelta en la A92 y tras acabar la recta del canal, me dirijo al PIE nuevo, subo la cuesta del tren y recorro bajo una fina lluvia y un viento huracanado los tres kilómetros del circuito. Por lo menos el bochorno y el calor se han disipado.
De regreso me dirijo al parque viejo y veo sorprendido que la puerta esta cerrada a cal y canto con una cadenón y con un candado mas grande aún que la cadea ¿que raro? pienso, para luego recordar que el ayuntamiento, en casos de vendaval y fuertes lluvias, cierra los parques para evitar que las ramas de los arboles que puedan caerse dañén a alguien. Me echo a temblar ¿no habrá sido mala idea salir a entrenar con este tiempo?
Hago de nuevo las rectas de las margenes del canal, ahora con menos viento y mas fresquito para volver a dirigirme hacia la parte nueva y me encuentro la puerta cerrada, cuando hace media hora estaba abierta. Me paro y observo que no tiene candado, solo esta encajada. La abro, paso y la dejo como estaba, el entreno es el entreno.
Ya terminando, salgo del PIE de vuelta a casa. 17ªC marca ahora el termómetro. Han bajado las temperaturas 4º en dos horas. No me extraña que no me haya cruzado con ningún corredor la hora que es. Como esta el tiempo no invita a salir de casa, Pero, curiosamente, las únicas personas que corrían con las que me he cruzado en todo el entreno han sido tres chicas, la primera acompañada de su pareja en bici y en el trnasportin a su hijo, las otras dos solas. Es decir, un día malo de viento y casi temporal de lluvia, el porcentaje de corredores es de un 75% de mujeres frente a un 25% de hombres (si contamos al encargado del estudio, que soy yo)
21km en 2:02 (múltiplo de 101km) en unas condiciones no muy propicias, pero que al llegar a casa tienes la sensación de haber hecho bien los deberes ;-)
Salud. Plum
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